miércoles, 27 de junio de 2007
La Estrategia de Morfeo
En sueños
pinto como Vermeer van Delft.
Hablo griego con fluidez
y no sólo con los vivos.
Piloto una nave
que me obedece.
Poseo talento
y escribo grandes poemas.
Oigo voces
no peor que los venerables místicos.
Mis dotes pianísticas
os dejarían boquiabiertos.
Revoloteo como es debido,
es decir, por propio impulso.
Me precipito desde el tejado
y sé caer, suave, en el verdor.
No tengo problemas
para respirar bajo el agua.
No puedo quejarme:
he contactado con extraterrestres.
Por suerte sé despertar siempre
antes de morir.
En cuanto una guerra estalla
me vuelvo del otro lado.
Soy hijo de mi época
pero no por obligación.
Hace un par de años
vi dos soles.
Y, anteayer, un dodo.
Con meridiana claridad.