miércoles, 11 de abril de 2007

De Pies a Tierra


Los sujetos eminentemente raros dependen de los tiempos. No todos tuvieron lo que merecían, y muchos, aunque lo tuvieron, no acertaron a lograrlo. Fueron dignos algunos de mejor siglo, que no todo lo bueno triunfa siempre; tienen las cosas su vez, hasta las eminencias son al uso. Pero lleva una ventaja lo sabio, que es eterno; y si este no es su siglo, muchos otros lo serán.