domingo, 25 de febrero de 2007
Out of the Blue
5:35 am. Abro el grifo y corre el agua a raudales mientras lleno la bañera para sumergirme en un relajante baño. A su vez, repaso los titulares de la prensa matutina: “El segundo invierno más caluroso desde 1913”… “Un asteroide chocará con la Tierra en el 2032”… “Un nuevo impuesto gravará las emisiones de dióxido de carbono de los automóviles”… “Ningún científico niega ya el cambio climático”…
Hace 800 millones de años nuestro planeta era una gigantesca bola de hielo. Hace 500 millones de años, un paraíso tropical. ¿Cuántos años tiene la selva amazónica? ¿40.000? ¿Y el hombre anatómicamente moderno? ¿45.000? Me pregunto por qué el catastrofismo nos resulta tan poético cuando vivimos una de las épocas de mayor diversidad biológica. Por cierto, ¿qué habrá sido del agujero de ozono? Es indudable que el hombre ha transformado el tercer planeta del Sistema Solar; tan solo basta observar fotografías nocturnas obtenidas desde satélites para impresionarnos con las luminarias emitidas desde nuestras grandes ciudades y áreas en desarrollo.
6:35 am. Cada vez me cuesta más ponerme en marcha. Si no me espabilo perderé el autobús y llegare tarde al trabajo. Bebo el café ya frío y a toda prisa enfilo hacia la calle bajando los escalones de tres en tres. Terribles dudas me asaltan mientras miro el reloj. ¿Habré cerrado la llave de paso del agua? ¿Habré cerrado con dos vueltas la puerta de casa?
6:43 am. Subo al autobús y distingo un asiento libre. No soporto ir de pie con tanto bamboleo.
6:44 am. Como salida de la nada, una dulce viejecita que apenas se sostiene en pie, realiza un demarraje con un insospechado cambio de ritmo y se despega del pelotón para instalarse a toda velocidad en el único asiento libre.
6:45 am. Anunciándome el cambio climático, se apagan un poco antes las luces de la ciudad. Pronto será verano y tendré vacaciones.